] El Brujo Chiripero
Pudiera ser un tabú para el gremio periodístico, pero el caso exige respuestas y explicaciones.
Las siguientes disyuntivas surgen de las denuncias presentadas por los trabajadores del municipio, afectados por la políticas laborales que han sido utilizadas en el Ayuntamiento de Acapulco para privilegiar a aviadores, funcionarios y hasta periodistas, con plazas sindicales al margen de la ley.
- ¿Debe Adela poner a trabajar a los “periodistas basificados” que no trabajan para el ayuntamiento de Acapulco pero sí cobran, ó correrlos y quitarles sus ”plazas ilegales” para entregárselas a quienes de verdad trabajan para el municipio pero, a pesar de 15 y hasta 30 años de antigüedad laboral, siguen siendo supernumerarios o trabajadores de lista de raya?
- ¿Qué opina el SUSPEG, al respecto?
- ¿Qué opinan las agrupaciones de periodistas, al respecto?
- ¿Qué opina la sociedad de estos periodistas sindicalizados que no trabajan para el ayuntamiento pero si cobran sus quincenas, bonos y aguinaldos del erario público del pueblo?
- ¿Qué se esperaría que haga una alcaldesa experta en leyes y sl frente de un gobierno que tiene como principal estandarte el combate a la corrupción?
- ¿Qué opinan los “periodistas basificados” de la “vergüenza” y la “dignidad”?
- ¿Qué opinan de esta situación aquellos periodistas que a diario se ganan el sustento con sacrificios, pero sobreviven con decoro y ejercen un periodismo libre de señalamientos como los que corresponden en el caso de Acapulco?
- ¿Deben los acapulqueños seguir manteniendo con sus impuestos a los aviadores y exfuncionarios de #Evodio Velàzquez basificados ilegalmente que la presidenta ‘aparenremente’ no quiere correr, como señalan con argumentos los trabajadores que aseguran que por más denuncias que se hacen estos siguen inamovibles en sus áreas y departamentos, jactándose de ser intocables y mofándose de los que llevan años esperando una plaza sin conseguirla?
¿NOMBRES?
Vaya usted a las 9 de la mañana y 3 de la tarde al ayuntamiento, allí verá puntuales a los aludidos en los chocadores de huellas digitales. Algunos aún portan sin pudor sus chalecos de prensa o uniformes con el logotipo de los medios para los que laboran; otros son más discretos o sus organizaciones sindicales justifican sus asistencias.
Si usted los ha visto en la tele, oído en la radio o leído en las redes sociales no tendrá ningún problema para identificarlos… ¡mucho menos Adela Román Ocampo, sobretodo porque algunos cubren la fuente de “Presidencia” y andan en horarios hábiles de trabajo municipal con la alcaldesa en casi todas sus giras!
Simples dudas… con respeto pleno al estilo de vida (no confundir el ‘modus vivendi’) de las personas, y sin daños a terceros.
P.D. Antes que algún aludido se alebreste por esta publicación, hay decir que en este caso no aplica la máxima “perro no come corre”, porque aunque valiera apegarse a ese refrán no hay que olvidar que “perro no come perro, pero perro si muerde a perro que se pasa de gandalla”.