Óscar Valero
SANTIAGO, Chile. * 10 de enero de 2020.
| Euronews.
Nuevas movilizaciones en la Plaza de Italia de Santiago de Chile este viernes, día de la semana al que han quedado circunscritas casi exclusivamente las protestas contra el Gobierno y la desigualdad, cuando se cumplen 12 semanas de su inicio.
Esta vez acabaron con el incendio de un autobús y algunos enfrentamientos con las fuerzas del orden. Estos hechos fueron la nota discordante de una jornada que contó con la participación pacífica de miles de personas en la rebautizada como Plaza de la Dignidad.
También se produjeron denuncias de ciudadanos y políticos por el presunto uso de sustancias químicas en el agua que la Policía arroja para dispersar a los manifestantes.
El color amarillo del agua que lanzaba la Policía desde los carros lanzaagua, según atestiguó Efe, en algunos vídeos, despertó las suspicacias sobre si se estaría mezclando con algún producto químico.
La movilización pierde fuerza, pero sigue constante
Las movilizaciones, que comenzaron el 18 de octubre del año pasado, en las que hasta la fecha han fallecido al menos 27 personas, han perdido fuerza, aunque sigue existiendo descontento en las calles y la crisis parece lejos de solucionarse, pese a las medidas sociales anunciadas por el Gobierno y al plebiscito sobre una nueva Constitución.
La marcha de esta jornada estuvo precedida por el boicot que al comienzo de la semana protagonizaron los estudiantes de secundaria contra la prueba de acceso a las universidades públicas y privadas.
Esta rebelión fue alentada por la Asamblea Coordinadora de Estudiantes Secundarios (Aces), que considera que esta prueba segrega a los estudiantes porque sus resultados reflejan el poder adquisitivo de sus familias, con base en el cual los más pudientes se forman en mejores escuelas de secundaria y consigue acceder a la universidad mediante la PSU. Mientras que los más desfavorecidos llegan a esta instancia peor formados y sin garantías de éxito.