] CIUDAD DE MÉXICO. * 30 de marzo de 2020.
| IMSSGro.
Fundado el 04 de marzo de 1954, el Hospital de Infectología “Dr. Daniel Méndez Hernández” del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), único en su tipo en el país y Latinoamérica, ofrece diagnóstico y tratamiento a pacientes con enfermedades infecciosas crónicas como VIH/Sida, Tuberculosis, Hepatitis, Sarampión, Meningitis, entre otras.
Actualmente está preparado para atender casos de COVID-19 y tiene implementados protocolos de seguridad ante contingencias con personal altamente capacitado, afirmó el doctor Gustavo Sánchez Huerta, director de dicho hospital.
Refirió que para el IMSS es muy importante la seguridad del paciente ante una contingencia como la que se está viviendo en la actualidad, así como disminuir la tensión que podría conllevar la llegada de posibles contagios a esta unidad.
Para ello, especificó, tienen un protocolo de seguridad que consiste en que al momento del ingresar se le pregunta cuál es el motivo de su visita y si éste refiere sintomatología respiratoria, de inmediato es canalizado a un área especial del hospital, donde es recibido por un médico que hace un cuestionario breve con la finalidad de indagar algunas cuestiones epidemiológicas y particulares de cada caso.
Si no cumple con estos criterios se le dan instrucciones generales, se le explica que no está en riesgo, que puede continuar su atención médica bajo otras circunstancias y es canalizado a su unidad correspondiente.
En el caso de que cumpla con los criterios para ser considerado como un caso sospechoso de COVID-19, pasa a un área asignada para una valoración más minuciosa. Ahí son recibidos por un médico infectólogo y por un epidemiólogo que hacen una serie de preguntas para confirmar si el paciente está en riesgo.
Si esto se confirma, lo primero que nos interesa ver es cuál es la gravedad y la urgencia de la atención, si es un caso no grave, se le dan indicaciones generales, se le toma la muestra y se puede reubicar a su domicilio. De no ser el caso, se hace una evaluación clínica para decidir si amerita hospitalización y en qué área del hospital se va a recibir, especificó el doctor Sánchez Huerta.
Agregó que en este proceso de selección interviene todo un equipo multidisciplinario de trabajadores de diferentes categorías. El primero es un elemento de seguridad que está capacitado para interrogar y canalizar rápidamente al paciente, el siguiente contacto inmediato es un médico que hace preguntas para seleccionar el riesgo y si amerita ser considerado.
Una vez que entra a la sala, es recibido por otro médico, quien realiza la evaluación clínica; luego, una enfermera le toma los signos vitales y ayuda a los cuidados que pueda necesitar. La última persona que interviene en este proceso es un técnico de laboratorio que está capacitado y toma las muestras pertinentes para la prueba confirmatoria.
De ahí, pueden suceder dos cosas: primero, que el paciente se vaya a su casa; segundo, si es hospitalizado intervienen los camilleros y demás personal que participa dentro del proceso de hospitalización normal.
El Hospital ya está reaccionando desde hace tres semanas clasificando a pacientes, afortunadamente el número de internamientos por esta razón no han superado los seis y hasta el momento han sido confirmados tres casos, pero con seguimiento desde sus domicilios y actualmente están llevando una buena evolución.
El director dio a conocer que el Hospital de Infectología es único en su género dentro del Instituto porque se dedica al 100 por ciento al manejo de enfermedades infectocontagiosas, lo que da la garantía de que el personal está capacitado.
El Hospital de Infectología tiene como naturaleza, misión y esencia en el manejo de pacientes con enfermedades infecciosas, es la única unidad hospitalaria del IMSS en la que se forman especialistas en Infectología por parte de la UNAM, “el 90 por ciento de sus médicos son infectólogos, tienen un altísimo nivel de competencia y ellos han sido capacitados desde el inicio de esta contingencia”, resaltó el doctor Gustavo Sánchez Huerta.
Informó que el Hospital está preparado con su mejor capacidad para atender esta contingencia, cuenta con una plantilla de 800 trabajadores, 128 camas de hospitalización para adultos y para niños, una terapia intensiva, servicios de apoyo como rayos x, laboratorio, cirugía, endoscopia, todo lo que el paciente pueda necesitar para su atención médica integral.
Agregó que el hospital está preparado con personal altamente capacitado para atender infecciones respiratorias y con la disponibilidad e infraestructura para atender a la contingencia que estamos enfrentando en la actualidad.
Es el mismo personal que enfrentó desde hace muchos años el primer brote de sarampión, epidemias de fiebre tifoidea en 1972; estuvo preparado para la posible llegada del virus del ébola en 1976; el VIH cuando empezó en 1985; el brote de Influenza; la hepatitis crónica C en 2004, y actualmente el COVID-19.