] LONDRES. * 16 de junio de 2020.
| AP.
Investigadores en Inglaterra anunciaron el martes que tienen evidencia de que un fármaco puede mejorar las posibilidades de sobrevivir al COVID-19: un esteroide económico y ampliamente disponible redujo las muertes en hasta un tercio en pacientes hospitalizados en condición grave.
Luego del anuncio, el gobierno británico autorizó inmediatamente el uso de dicho esteroide en toda Gran Bretaña para pacientes con síntomas similares a los de aquellos que mostraron buenos resultados en el estudio. Los investigadores dijeron que pronto publicarán los resultados, y varios expertos independientes dijeron que era importante conocer los detalles para saber qué clase de efecto tendría la dexametasona y en quién.
“Pero la conclusión general es que se trata de una buena noticia”, dijo el doctor Anthony Fauci, el principal especialista en enfermedades infecciosas de Estados Unidos. ”Es una mejora significativa en las opciones terapéuticas disponibles”, añadió.
La pandemia de coronavirus ha provocado la muerte de más de 438.000 personas en todo el mundo desde que comenzó a finales del año pasado en China.
El estudio, liderado por la Universidad de Oxford, fue una prueba amplia y estricta que suministró el medicamento a 2.104 enfermos escogidos al azar, a los que comparó con 4.321 pacientes que recibieron el tratamiento habitual.
A los pacientes elegidos se les suministró el medicamento por vía oral o intravenosa durante 10 días. Después de cuatro semanas, el medicamento redujo en un 35% las muertes de enfermos que requirieron tratamiento con respiradores artificiales y en un 20% en los que sólo necesitaron oxígeno adicional. Aparentemente no ayudó a los pacientes menos graves.
Los investigadores calcularon que el medicamento evitaría una muerte por cada ocho enfermos conectados a un respirador y una por cada 25 pacientes tratados únicamente con oxígeno.
“Son resultados importantes”, dijo el doctor Martin Landray, uno de los autores del estudio. “No es una cura, pero sin duda es un gran paso hacia adelante”. Agregó que el hecho de que el medicamento es ”notablemente económico, quizás 20 o 30 dólares para todo un tratamiento”, es una noticia particularmente buena.
Los esteroides reducen la inflamación que suele producirse en los pacientes de COVID-19 como reacción del sistema inmunitario al combatir la infección. Esta reacción excesiva lesiona los pulmones y puede ser fatal. La Organización Mundial de la Salud y otros aconsejan no utilizar los esteroides en etapas tempranas de la enfermedad porque pueden impedir la eliminación del virus.
“Al principio uno combate el virus y quiere que el sistema inmunológico permanezca lo más intacto posible”, dijo Fauci. Pero en estados avanzados del COVID-19, la batalla contra el virus provoca tanta inflamación que “lesiona más de lo que ayuda”, comentó y añadió que los resultados del estudio de Oxford “coinciden perfectamente” con ese concepto.
Muchos hospitales y médicos han utilizado esteroides para reprimir al sistema inmune, pero no hay pruebas de estudios de alta calidad sobre que ayude a tratar el COVID-19.
Aunque los investigadores de Oxford sólo mencionaron la dexametasona, los planes detallados para el estudio señalaron que los hospitales participantes podían utilizar otros dos esteroides —la prednisolona o la hidrocortisona— y no hay razón para pensar que alguno en particular funcione mejor que el otro, comentó el médico Francisco Marty, especialista en enfermedades infecciosas en el Brigham and Women’s Hospital de Boston.
“Asumo que la mayoría de la gente utilizó dexametasona, pero no es el único que la gente pudo haber usado”, señaló. “Será genial ver los datos para ver si hay un efecto de clase”.
Se sabe que los esteroides ayudan a combatir ciertas infecciones fúngicas o bacterianas, como meningitis, y un tipo de neumonía común en pacientes con VIH, pero no han demostrado ser útiles contra la influenza u otras enfermedades virales, señaló. Los resultados del estudio de Oxford lo persuadirían para probarlos en pacientes con COVID-19 que necesitan oxígeno adicional, comentó.
Hasta ahora, el único medicamento que ha demostrado ayudar a combatir el COVID-19 es el remdesivir, un fármaco experimental de Gilead Sciences que bloquea una enzima que el virus utiliza para copiar su material genético. El remdesivir acortó el tiempo de recuperación en pacientes en condición grave a 11 días en promedio, respecto a los 15 días que tardaron aquellos a los que se les proporcionó el tratamiento habitual, en un estudio dirigido por los Institutos Nacionales de la Salud de Estados Unidos.
“Todavía no sabemos” si el remdesivir podría utilizarse con la dexametasona —o antes o después de ella— para un mayor beneficio, señaló Fauci.
Aunque la dexametasona sólo ayuda en casos graves, “se salvarán innumerables vidas a nivel internacional”, dijo Nick Cammack, experto en virus en el Wellcome Trust, una organización benéfica británica que respalda la investigación.
“Este es el sueño” porque el medicamento se ha utilizado durante décadas para otras enfermedades, dijo Cammack, quien no participó en el estudio. “Es muy sencillo producirlo, así que no hay razón para que esto no se pueda implementar en todo el mundo”, añadió.
No se dio información sobre efectos secundarios, pero los investigadores dijeron que utilizaron una pequeña dosis y por un periodo corto, lo que generalmente es seguro.