NUEVA YORK. | 2 de diciembre de 2020.
] Efe.
El secretario general de la ONU, António Guterres, alertó este miércoles de que la humanidad está librando una “guerra” suicida contra la naturaleza y urgió a un “rescate” del planeta, convirtiendo la lucha contra el cambio climático en una prioridad absoluta.
“Hacer paz con la naturaleza es la tarea definitoria del siglo XXI. Tiene que ser la prioridad número uno para todos, en todas partes”, defendió Guterres en un discurso en la Universidad de Columbia, en Nueva York.
El jefe de Naciones Unidas aseguró que para 2021 el “objetivo central” de la organización será construir una “verdadera coalición para la neutralidad del carbono” y lograr de esta forma dar un gran impulso a la lucha contra el calentamiento global.
“Todo país, ciudad, institución financiera y compañía debe adoptar planes para una transición a emisiones netas de carbono cero para 2050 y tomar acciones decididas ahora para ponerse en la trayectoria adecuada para cumplir esta visión, lo que quiere decir recortar las emisiones un 45 % para 2030 con respecto a los niveles de 2010”, señaló.
En ese sentido, destacó las noticias esperanzadoras conocidas recientemente, después de que la Unión Europea, Japón, Corea del Sur y otros países se hayan comprometido a lograr la neutralidad para 2050, de que el futuro Gobierno de Estados Unidos haya anunciado que buscará ese mismo objetivo y de que China se haya fijado lograrlo para 2060.
“Esto quiere decir que para comienzos del año próximo, países que representan más del 65 % de las emisiones globales de dióxido de carbono y más del 70 % de la economía global habrán hecho compromisos ambiciosos para la neutralidad. Tenemos que convertir este impulso en un movimiento”, apuntó.
“Colapso de la biodiversidad”
Guterres ofreció este discurso sobre el “estado del planeta” apenas unas horas después de que la Organización Meteorológica Mundial (OMM) hiciese públicos datos que señalan que 2020 será uno de los tres años más calurosos en más de siglo y medio de medición científica de las temperaturas.
El diplomático portugués hizo un desolador retrato de la situación del mundo, advirtiendo sobre el “colapso de la biodiversidad” con más de un millón de especies en peligro de extinción, el avance de los desiertos, la deforestación, la contaminación de los océanos o la mortífera polución del aire y el agua que mata a millones de personas cada año.
Al mismo tiempo, aseguró que hay señales para la esperanza, con más y más gente -sobre todo los jóvenes- que entienden el problema que plantea el cambio climático y reclaman soluciones.
“Este es un momento de la verdad para las personas y para el planeta. La COVID-19 y el clima nos han traído a un límite. No podemos volver a la vieja normalidad de desigualdad, injusticia y dominio negligente de la Tierra”, defendió.
En ese sentido, Guterres aseguró que la recuperación de la pandemia ofrece una oportunidad para apostar por un modelo verde que combata el cambio climático, pero dejó claro que para el planeta “no hay una vacuna”.
“El planeta necesita un rescate”, insistió, subrayando que los billones de dólares que se están invirtiendo para superar la crisis desatada por el coronavirus tienen que usarse para avanzar a una “economía sostenible”, alimentada por energías renovables.
“La puerta está abierta, las soluciones están ahí. Ahora es el momento de transformar la relación de la humanidad con el mundo natural y con cada uno de nosotros”, insistió.