GEORGIA DEL SUR. | 9 de diciembre de 2020.
] Reuters.
Un enorme iceberg se dirige hacia la isla Georgia del Sur en el Atlántico Sur, donde los científicos dicen que una colisión podría devastar su vida silvestre, que incluye pingüinos, focas y albatros.
Los científicos han pasado semanas observando cómo se desarrolla este evento relacionado con el clima, ya que el iceberg, aproximadamente del mismo tamaño que la isla misma, ha serpenteado y avanzado durante dos años desde que se separó de la península Antártica en julio de 2017.
La península es uno de los lugares de más rápido calentamiento en la Tierra, registrando una temperatura récord de 20,75 grados Celsius el 9 de febrero. El calentamiento tiene a los científicos preocupados por el derretimiento del hielo que conduce al aumento del nivel del mar en todo el mundo.
El gigantesco iceberg, apodado A68a, está en camino de chocar con la isla Georgia del Sur, un remoto territorio británico de ultramar frente a América del Sur.
Sin embargo, no está claro si la colisión ocurrirá en días o en semanas, ya que el iceberg se aceleró y desaceleró con las corrientes oceánicas en el camino, dijo Geraint Tarling, un oceanógrafo biológico del British Antarctic Survey, que ha estado rastreando la masa de hielo.
Una colisión aún es incierta, ya que las corrientes podrían llevar el iceberg más allá de la isla, dijo Tarling.
“Las corrientes alrededor de la isla son complejas y aún es posible que no pase”, agregó.
Imágenes capturadas por un avión de la Royal Air Force británica publicadas el martes muestran la magnitud del monstruoso iceberg de 4.200 kilómetros cuadrados, cuya superficie tiene túneles, grietas y fisuras. Se pueden ver trozos de hielo flotando cerca.
“El tamaño del iceberg A68a significa que es imposible capturarlo enteramente en una sola toma”, dijeron funcionarios británicos en un comunicado.
Los científicos temen que el iceberg, al golpear la isla, pueda aplastar la vida en el lecho marino. Si se alojara en el flanco de la isla, podría bloquear a los pingüinos y aislarlos de sus rutas normales para alimentar a sus crías.
El A68a también podría ser un obstáculo para que los barcos del gobierno realicen patrullas de pesca y vigilancia alrededor de Georgia del Sur y las islas Sandwich del Sur, dijeron funcionarios británicos.