Tercera Vía
» Ernesto Rivera Rodríguez.
Adela camina de nuevo por los laberintos abiertos por la Médusa en qué se ha convertido la antidirigencia de Morena, con Mario Delgado Castillo como representante sin autoridad alguna y sólo esperando las señales que salen desde la Mañanera, espacio que se ha convertido en el diapasón de la política nacional.
Se conoce que en política No existen huecos, un concepto que desde la física no tiene sentido, pero la alcaldesa de Acapulco, Adela Román Ocampo ha encontrado el «resquicio negado por la física» por dónde caminar de nuevo en búsqueda de la candidatura de Morena al gobierno del estado.
La incongruencia y errores mayúsculos, la falta de criterios definidos, y el total desorden ante la falta de autoridad política de la dirigencia nacional de Morena le ha permitido a Adela Román argüir legitimidad en su nuevo intento, dejando Acapulco a un encargado de despacho en una ciudad que emite sísmicas condiciones de inseguridad y de servicios públicos y enmedio de una pandemia que parece incontrolable y con protocolos de vacunación demasiado lejos.
La incertidumbre de la definición final de la candidatura al gobierno del estado de Guerrero que se mantiene hoy en la total incertidumbre, pese a la presión mantenida exclusivamente por su poder político del inquilino del Palacio Nacional, al multiseñalado supuesto candidato Félix Salgado Macedonio, contra la fuerza titánica de la opinión pública a derivado en un choque de trenes que nadie de atreve a vislumbrar el final político, y que sea cual sea este, el daño político y social es ya de enormes consecuencias, hasta para el propio presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador.
Aquí en este resquicio es donde la alcaldesa de Acapulco ha encontrado su espacio para abrirse camino rumbo a lograr su sueño dorado que puede convertirse en un verdadero infierno y su propia tumba política si no lo consigue, arrastrando además a su partido a un desgaste tan grande que ya desde hoy, pase lo que pase no se advierte claro su triunfo el próximo 6 de Junio.
En tanto no se puede olvidar que Luis Walton Aburto, desde su posionamiento continúa con grandes expectativas ante la opinión pública de obtener la resolución final sobre la candidatura para Guerrero, que sin dudarlo se habrá de tomar en la más absoluta privacidad como en los tiempos hoy tan maldecidos, aquí donde dicen que todo ha cambiado para que todo siga igual…o peor.
