* Candidatos se «cuelgan» de estos hechos.
Tercera Vía
] Ernesto Rivera Rodríguez.
Las campañas políticas se han convertido en un trapecio para golpear a las autoridades municipales de todo lo negativo, y sálvese el que pueda de lo que sucede en la ciudad, su zona periférica y zona rural..en una ciudad plena de dinamismo y compleja vida cotidiana.
Las estadísticas nos muestran que Acapulco y Guerrero como entidad van superado los estadios de violencia que le azotaban hace unos años. Hoy son escasos, donde se ha actuado con programas de seguridad, atención ciudadana y un permanente recorrido y atención por parte de los cuerpos de seguridad municipal, estatal, la guardia nacional y la Sedena.
De ahí que con muy «gusto» candidatos a puestos de elección popular como lo es Abelina López Rodríguez, y su grupo señalaron ante los medios, la injerencia de su acérrimo adversario político en un evento suscitado entre dos grupos antagonismos sobre la avenida Constituyentes, a la altura de la colonia La Laja, y la falta de seguridad por parte de los cuerpos de SEGURIDAD, siendo totalmente rechazados por la Fiscalía General del Estado, aún así tuvo la osadía de «romperse las vestiduras».
De los hechos sucedidos en La Sábana la tarde noche de ayer, resultó de una diferencia entre civiles, en donde las autoridades acudieron al primer llamado y todo lo contrario a lo vertido por el candidato a la alcaldía Ricardo Taja Ramírez, que busca también llevar «agua a su molino» cómo remedo de lo vertido un día antes como su contraparte morenista.
Si hay alguien OCUPADOS en la seguridad de los acapulqueños son el propio gobernador del estado, Héctor Astudillo Flores y la edil Adela Román Ocampo, los cual han sido reconocidos y felicitados, en la mismísima Mesa para la Construcción de la Paz, y quienes sin escatimar esfuerzos han mantenido una firme estrategia y cooperación por la seguridad en Acapulco, manteniendo sus dígitos dentro del Top 10 de los índices más bajos de violencia en el país.
Busquen en otros lados «los tres pies al gato», porque lo único que muestran estos candidatos es su desesperación ante el desencanto del electorado, que solo ven en ellos una «caballada flaca» rememorando a desaparecido gobernador del estado.