SENADO DE LA REPÚBLICA. * 30 de junio de 2021.
) Especial.
El Senador guerrerense Manuel Añorve Baños solicitó la comparecencia inmediata ante la Comisión Permanente del Congreso de la Unión y, de paso, la renuncia del titular de la Subsecretaría federal de Salud, Hugo López-Gatell Ramírez, por el pésimo manejo de la pandemia, el cual ha dejado miles de muertes por su irresponsabilidad y por el desabasto de medicamentos contra el cáncer infantil, además de sus recientes declaraciones insolentes que hizo contra los niños con cáncer.
«Por dignidad, y previo a su renuncia, es necesario que el subsecretario López-Gatell comparezca ante esta soberanía para que explique ampliamente cómo y cuándo se va a resolver el problema del desabasto de medicamentos oncológicos, que afecta principalmente a niños con cáncer, así como sus recientes declaraciones descalificando a los padres de los afectados por dicha crisis», precisó el Senador Añorve.
Dijo que es imperdonable el comportamiento y las acusaciones del responsable de la prevención y promoción de la salud, quien ante su propia incapacidad y negligencia decide desviar la atención y adoptar una narrativa de conspiración, en lugar de cumplir la función que le ha sido encomendada.
El legislador federal criticó que López Gatell declarará en televisión nacional que «los padres de niños con cáncer son parte de un complot internacional para asestar un golpe de estado», palabras que solo pueden ser dichos de un loco o de un mentecato, subrayó Añorve Baños, quien condenó enérgicamente la actitud del vocero federal de la pandemia al denigrar a las familias de los niños con cáncer. «Son insultantes para toda la población mexicana, puesto que los servidores públicos están para eso, para servir, no para manifestar sus ideas ridículas y pendencieras en televisión», suscribió.
Respecto al mal manejo de la pandemia, Manuel Añorve expresó que, en otros países, al subsecretario de Salud ya lo hubiesen destituido del cargo desde el día dos de la pandemia; además, calificó a López-Gatell como el peor funcionario federal.