] Acapulco. * 20 de abril de 2016.
Ex integrantes del Movimiento Estudiantil Kiosco se manifestaron en contra de la representante del mismo, Margarita Martínez García, y advirtieron a los aspirantes a la Unidad Académica de Medicina, de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAG), que no se dejen engañar por ella si pretende nuevamente lucrar con la admisión para el próximo año escolar.
Los jóvenes, algunos de los cuales estudian sin matrícula en la Unidad Académica de Medicina y otros no estudian, informaron que están recopilando pruebas para demandar a Margarita Martínez, quien se quedó con más de 360 mil pesos que serían para el pago de la colegiatura de 17 estudiantes que ingresaron al Centro Universitario Hipócrates.
El grupo de diez jóvenes se colocó en el camellón del entronque de la avenida Costera con Farallón, frente a la glorieta de la Diana, donde estuvieron en plantón, con una manta con la leyenda “las verdades de la líder del Movimiento Kiosco, Margarita eres una ratera” y diferentes fotografías.
La ex integrante de Movimiento Kiosco y primera en entrar a la Unidad Académica de Medicina con un amparo, Janet Ortega Tapia, expuso que no está inscrita, no tiene matrícula y es humillada por los maestros y compañeros, “simplemente estamos hartos”.
Expuso que se encuentran en esa situación por confiar en Margarita Martínez, quien les aseguró que podrían ingresar a la UAG y no es así, por lo que llamó a la población a que no vuelvan a creer en la líder de estudiantes.
Ortega Tapia explicó que en el caso de los jóvenes que ingresaron al Centro Universitario Hipócrates, al mes de ingresar los dieron de baja porque no pagaron la colegiatura. “Ella (Margarita Martínez) tomó la decisión que los sacaran y procedieran las demandas, para intentar entrar a la facultad, pero tampoco han dado solución”.
Los jóvenes indicaron que Margarita Martínez cobro más de 360 mil pesos que serían para la colegiatura de 17 estudiantes que ingresaron a la escuela privada, sin embargo no les dio el dinero, ni hizo el pago de la mensualidad para que continuaran con sus estudios.
Otra de las jóvenes, Lizbeth García Gálvez, dijo que le daban un plazo de un día al abogado del movimiento, Noé Albino Salgado, para que les informe del proceso de amparos y demandas, porque según saben no se hicieron y sólo los han estado engañando.
Agregó que el abogado les dice que vuelvan a confiar en ellos, sin embargo los jóvenes se sienten extorsionados porque durante el movimiento pagaron cooperaciones de 50 a 500 pesos por cada actividad y no les resolvieron su demanda de ingresar a la UAG a estudiar.
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