] MÉXICO. * 27 de enero de 2017.
Si usted se aplicó la vacuna contra el virus del papiloma humano (VPH, relacionado con el cáncer de cérvix), podría pensar que ya no es necesario realizarse la prueba de papanicolau o citología vaginal, que busca detectar lesiones cancerosas o precancerosas.
Sin embargo, especialistas en ginecología y oncología de Estados Unidos aseguran lo contrario, pues el peligro de contraer este microorganismo no desaparece en su totalidad.
«La vacuna reduce la posibilidad de cáncer, pero todavía no se ha mostrado que elimine la necesidad de las pruebas, porque una cosa es bajar el riesgo y otra eliminarlo en un 100%», indicó en un comunicado de prensa Jayanthi Lea, ginecóloga-oncóloga de la Universidad de Texas.
Según los médicos, si alguien se vacunó contra el VPH, la prueba de papanicolau podría efectuarse de forma más espaciada (con un año más de distancia), pero no eliminarla del todo. La recomendación actual es hacer el examen cada uno o dos años, dependiendo de cada paciente.
El ginecólogo costarricense Danilo Medina es de la misma opinión: «una mujer que está vacunada y que se hace una citología y el médico determina que está normal, tal vez pueda volverse a realizar otro dentro de cinco años y no un año después o dos, como es lo usual. Pero, no podría eliminar la citología del todo, es una prueba necesaria».
El especialista también aclaró que las vacunas no protegen de todos los tipos de VPH que podrían eventualmente causar lesiones que lleven a un cáncer.
«La vacuna bivalente protege de los tipos 16 y 18 del virus, que causan el 70% de los casos de cáncer de cérvix, pero hay un 30% de virus que se escapan de esa protección. Hay vacunas tetravalentes que protegen contra cuatro tipos, y está por llegar al país una nonavalente que protege contra nueve virus que causan el 95% de los tumores, pero aún nos quedamos con un 5% del que ninguna vacuna protege», aseveró.
Además, la vacuna no es eficaz en un 100%. Los estudios determinan que tres dosis de la vacuna contra el VPH eliminan hasta un 93% la probabilidad de infección con las cepas del virus que protegen, pero siempre hay al menos un 7% en el que se hace más recomendable realizarse el examen.
] La Nación