BUENOS AIRES, Argentina. * 9 de julio de 2019.
] AFP.
El expresidente Fernando de la Rúa (1999-2001), cuyo gobierno cayó en medio de la peor crisis de la historia reciente de Argentina, falleció en la madrugada del martes a los 81 años de edad, tras una larga convalecencia por enfermedades cardíacas y renales.
De la Rúa fue líder de un sector conservador de la socialdemócrata Unión Cívica Radical (UCR) y rival histórico dentro del partido del expresidente Raúl Alfonsín (1983-1989), padre de la recuperación democrática después de la última dictadura.
El anuncio fue hecho al país por el presidente Mauricio Macri en un mensaje en las redes sociales, donde realizó un reconocimiento a su «trayectoria democrática». Macri encabeza este martes los actos por el Día de la Independencia de la corona española.
«Era un dirigente bienintencionado, una buena persona», dijo Macri sobre De la Rúa al iniciar su discurso en la ceremonia central en Tucumán (norte), ciudad donde congresales de la incipiente nación declararon el fin «de toda dominación extranjera» el 9 de julio de 1816.
El exmandatario firmó su renuncia el 20 de diciembre de 2001, forzado por una rebelión popular con decenas de miles de personas en las calles que protestaban contra la recesión, el alza en el costo de los alimentos y el congelamiento de los depósitos de los ahorristas en los bancos por casi 70.000 millones de dólares.
Sus restos serán velados en el Palacio del Congreso a las 16H00 locales (19H00 GMT).
De la Rúa había sido hospitalizado la noche del lunes en un sanatorio de Buenos Aires por una descompensación cardíaca y renal.
La subsecretaria de Estado de Estados Unidos, Kimberly Breier, expresó en Twitter sus «profundas condolencias».
«Un día triste, un poco de melancolía porque no deja de ser un presidente», dijo a la AFP Paula Galeano, una maestra que estaba en la Plaza de Mayo, frente a la Catedral donde se celebró el Tedeum por el 9 de julio.
El histórico paseo y otras plazas de Argentina fueron escenarios en 2001 de una represión policial que dejó como saldo global 39 muertos.
Salida en helicóptero
Su nombre quedó ligado al fin de la convertibilidad, un régimen que ató el tipo de cambio en una relación de un peso igual a un dólar y que duró una década. Tuvo que marcharse en un helicóptero desde la azotea de la casa de gobierno, rodeada de manifestantes.
«Aquel 2001 va a quedar grabado en la historia, aunque no deja de ser una buena persona», dijo Oscar del Canto, un comerciante, en la Plaza de Mayo.
Para completar su período de gobierno, la Asamblea Legislativa nombró en la presidencia al peronista conservador Adolfo Rodríguez Saá, quien declaró el default de la deuda con acreedores privados por casi 100.000 millones de dólares. Una semana después tuvo que renunciar.
La Asamblea nombró entonces a otro peronista, Eduardo Duhalde, quien en medio de la crisis llamó a elecciones en 2003, año en que empezó la era de 12 años de gobiernos del matrimonio Kirchner, primero Néstor y después Cristina, peronistas de centroizquierda.
El padre de la convertibilidad había sido el economista liberal heterodoxo Domingo Cavallo, exministro de Economía del gobierno peronista de derecha de Carlos Menem (1989-1999) y luego de De la Rúa.
Alianza antimenemista
Fernando de la Rúa saluda durante su asunción como presidente argentino, el 9 de diciembre de 1999 en Buenos Aires.
De la Rúa había asumido al frente de una alianza antimenemista en 1999, pero la recesión que heredaba se agudizó, en tanto aparecían casos de corrupción como uno de sobornos a senadores para que se aprobara en el parlamento una ley de flexibilidad laboral que eliminó derechos de los trabajadores.
A causa de las denuncias de corrupción renunció el vicepresidente, Carlos «Chacho» Álvarez, peronista de centroizquierda.
De la Rúa había sido hospitalizado al menos dos veces este año. Fue operado por un delicado cuadro cardiovascular.
La última vez que se presentó en público fue como invitado a la función de gala en el Teatro Colón, templo de la lírica, en noviembre pasado en el marco de la cumbre del G-20.