] GOOGLE. * 3 de abril de 2020.
| RT.
Ya sabemos que Google parece saberlo todo sobre todos. Y en medio de la pandemia de coronavirus, la empresa ha decidido usar su seguimiento persistente de dónde van y qué hacen sus usuarios para el bien público.
En una publicación en su blog, el gigante tecnológico anunció el lanzamiento del proyecto COVID-19 Community Mobility Reports, un análisis interno de los datos de ubicación recopilados por teléfonos inteligentes para ayudar a los funcionarios de salud pública a comprender cómo han cambiado los movimientos de la población después de la introducción de medidas restrictivas como la cuarentena obligatoria.
Estos informes de movilidad comunitaria utilizan los datos de las personas que han optado por almacenar su historial de ubicaciones en Google y tienen como objetivo ilustrar el grado en que la gente ha seguido las instrucciones de los gobiernos para quedarse en casa en el último mes.
Según detalla la compañía, los informes muestran las tendencias de movimiento a lo largo del tiempo en diferentes categorías de lugares, como tiendas y recreación, supermercados y farmacias, parques, estaciones de tránsito, lugares de trabajo y residenciales.
Para Estados Unidos, los datos se desglosan condado por condado, mostrando disminuciones masivas del movimiento de personas en comunidades urbanas y suburbanas, con caídas de hasta el 80 % en algunos casos, y disminuciones relativamente modestas en las zonas rurales.
Por ejemplo, los datos de seguimiento de movilidad para Nueva York, el epicentro de la pandemia en el país norteamericano, muestran una disminución del 62 % para locales comerciales y recreativos, el 68 % para centros de transporte público como estaciones de metro, autobús y tren, el 46 % para lugares de trabajo y el 32 % para supermercados, tiendas y farmacias.
La compañía tiene la intención de actualizar sus cifras regularmente y asegura que los informes están diseñados para proteger el anonimato de los usuarios, ya que proporcionarán información general sobre sus visitas a ciertos lugares, pero no de su ubicación.
Aunque el proyecto puede servir para demostrar el potencial del distanciamiento social para mitigar el impacto del coronavirus, varios expertos instan a tener precaución ante la capacidad de Google de rastrear la vida cotidiana de los usuarios.