] SEÚL. * 26 de junio de 2020.
| AP.
Mientras China está cerca de contener un nuevo brote de coronavirus en Beijing, la pandemia sigue avanzado en otras partes del mundo, incluyendo Estados Unidos, donde el aumento de las infecciones en los estados del sur puso de manifiesto los peligros de reactivar las economías sin que exista una vacuna o un tratamiento efectivo contra el COVID-19.
Tras un nuevo récord de contagios diarios el viernes, India rozaba el medio millón de casos, y otros países con grandes poblaciones como Indonesia, Pakistán y México enfrentan importantes alzas en sistemas de salud colapsados.
Sudáfrica, que tiene alrededor de la mitad de las infecciones en África, con 118.375 casos, reportó un récord de 6.579 nuevos casos como parte de un repunte luego de aliviar a principios de mes la que era una de las cuarentenas más estrictas del mundo.
México registró una de sus cifras de contagios más elevadas, con 6.104 casos y 736 muertes en 24 horas, mientras el secretario de Hacienda y Crédito Público, Arturo Herrera, inició su aislamiento en casa tras dar positivo al virus.
En China, el país donde se originó la pandemia en diciembre, las autoridades han movilizado recursos para realizar tests masivos y aislaron partes de Beijing este mes por un brote que ha infectado a 260 personas. Los 11 nuevos contagios reportados el viernes continúan una tendencia a la baja que sugiere que las transmisiones están en su mayoría bajo control.
Estados Unidos, la nación con más casos confirmados del mundo, está registrando incrementos diarios que se acercan a los de finales de abril, en el pico de la crisis sanitaria allí.
Con 3.056 infecciones reportadas el jueves, Arizona sumó su cuarto día con más de 3.000 contagiados diarios en una semana. Las transmisiones se dispararon luego de la decisión del gobernador, el republicano Doug Ducey, de levantar en mayo las restricciones de quedarse en casa. El 25% de las pruebas realizadas en el estado en los últimos siete días fueron positivas, casi del triple de la media nacional, y un récord de 415 pacientes necesitaban respiradores artificiales.
Estados Unidos reportó 34.500 casos nuevos de COVID-19 el miércoles, un poco menos que en la víspera, pero todavía cerca de la marca de 36.400 alcanzada el 24 de abril, según un conteo de la Universidad Johns Hopkins.
El promedio diario subió en más del 50% en las dos últimas semanas, según un análisis de The Associated Press. Los números reales son probablemente muchos más altos por el acceso limitado a las pruebas y otros factores.
El número de fallecidos bajó, aunque el de contagios haya subido, probablemente en un reflejo de la mejora de los tratamientos médicos y de los esfuerzos por evitar infecciones entre los más vulnerables, como las residencias de mayores. En Estados Unidos hay una proporción cada vez más alta de contagios entre jóvenes, que tienen más posibilidades de sobrevivir a un brote que los ancianos.
India, el segundo país más poblado del mundo, bate casi a diario su récord de infectados. Los 17.296 reportados el viernes elevaron el total nacional por encima de los 490.000, incluyendo 15.301 fallecidos. La empresa ferroviaria Indian Railways demoró la reanudación de su servicio en más de un mes, hasta el 12 de agosto.
Un rebrote está borrando también los avances logrados en Corea del Sur, que el viernes confirmó 39 casos más, en su mayoría en la zona metropolitana de la capital, donde vive más de la mitad de su población y que había escapado a lo peor del brote que azotó la nación en febrero y marzo. Los críticos señalan que las autoridades, preocupadas por la fragilidad de su economía, se apuraron al suavizar las recomendaciones de distanciamiento social y reabrir las escuelas en mayo.
La capital de Japón, Tokio, confirmó 54 nuevos casos, continuando con un aumento constante que plantea preocupaciones acerca de la necesidad de adoptar medidas preventivas más contundentes. La gobernadora, Yuriko Koike, restó importancia a los temores de un brote importante que pudiese saturar los hospitales de la ciudad.
Australia reportó el viernes 37 nuevos casos de coronavirus, 30 de ellos en el estado de Victoria, donde las autoridades sanitarias trabajar para contener un brote.
En Europa, el epidemiólogo al frente de la respuesta de España al COVID-19 informó que las infecciones importadas son una creciente fuente de preocupación mientras el continente se prepara para recibir a más visitantes.
En Gran Bretaña, el secretario de Salud, Matt Hancock, advirtió que el gobierno tiene poder para cerrar playas y otros espacios públicos ante las crecientes preocupaciones por el cumplimiento de las normas de distancia social. Además de las aglomeraciones en playas, también preocupaba la concentración de los exultantes aficionados del Liverpool en el exterior de su estadio para celebrar el primer título de la Premier League del club en 30 años.
En Alemania, Westfleisch, una de las mayores empresas de procesado de carne del país, dijo el viernes que realizará pruebas de coronavirus diarias a los 5.000 trabajadores implicados en su proceso de producción ante la preocupación por una serie de brotes en mataderos.