CARACAS. | 9 de diciembre de 2020.
] Efe / Agencias.
El chavismo volverá a dominar el Parlamento venezolano después que este miércoles (09.10.2020) confirmara su arrolladora victoria en los cuestionados comicios del domingo, en los que con un 30 por ciento de participación consiguió 253 escaños, de los 277 en liza, y cuyo proceso electoral fue rechazado por la oposición mayoritaria, la OEA y la UE.
El oficialismo obtuvo en 2015, con 5.625.248 votos, el 32,9 por ciento de los asientos en la Asamblea Nacional (AN, Parlamento) y ahora con más de 1.300.000 respaldos menos se hizo con el 91 por ciento de la Cámara debido a la no participación de la oposición mayoritaria hasta ahora que consideró un fraude la elección.
El resultado otorga el más absoluto control parlamentario que haya tenido organización política alguna desde que el Legislativo fue instaurado en el año 2000.
El último boletín del Consejo Nacional Electoral (CNE), publicado a las 17.00 hora local (21.00 GMT), la cifra el total de votos contados es de 6.227.690, lo que representa el 30 por ciento del total del padrón electoral de 20,7 millones de venezolanos.
No obstante, la participación oficial reportada hasta ahora es del 30,50 por ciento, por lo que se desconoce si hay variaciones con respecto a ese porcentaje o se queda finalmente en el 30 por ciento, en cuyo caso fueron contados todos los votos emitidos.
Según el informe, el gobernante Partido Socialista Unido (PSUV) se queda con 253 escaños, mientras que las formaciones opositoras Acción Democrática (AD) y Primero Venezuela (PV) se hicieron con 11 y 2 escaños, respectivamente.
Los otros asientos obtenidos por la oposición minoritaria que participó en estos comicios fueron tres para Avanzada Progresista (AP), tres para El Cambio, una para el partido socialcristiano Copei y otra para el Partido Comunista (PCV).
Dos victorias confirmadas este miércoles desataron la polémica en el país al tratarse de dos opositores que resultaron electos por modalidades distintas a las que se postularon.
Uno de ellos es el diputado Luis Parra, respaldado como presidente de la AN por el chavismo y la oposición minoritaria, quien consiguió la reelección mediante la «lista nacional», si bien él competía por la lista regional de Yaracuy, el estado occidental del que es oriundo.
Elección de comunidades indígenas
El otro caso lo protagoniza Timoteo Zambrano, líder de la formación Cambiemos, quien compitió en las votaciones respaldado únicamente por su partido y no consiguió los votos suficientes para la victoria.
Tras el acto electoral, el CNE informó que gracias a una alianza partidista, que no se conoció hasta este martes, el dirigente había obtenido la curul.
Zambrano y Parra habían sido acusados por la oposición mayoritaria que controla el Legislativo de ser «colaboracionistas» del chavismo y de mantener acuerdos en secreto con el Gobierno para lucrarse.
La adjudicación de 274 escaños deja solo tres puestos por definir, los mismos que se están eligiendo este miércoles en unas votaciones aparte en las que solo participan miembros de las comunidades indígenas.
Tradicionalmente, esas votaciones se realizaban en la misma jornada que el resto, pero este año el CNE decidió cambiar el proceso de la elección de los representantes de los indígenas al eliminarles el voto directo y realizarlo en una fecha distinta.
El proceso para escoger a los tres parlamentarios se está realizando en 10 de los 23 estados de Venezuela que representan a las tres regiones del país con comunidades indígenas.
Según informó el CNE, el padrón electoral de etnias minoritarias para esa votación es de 3.558 electores, pues previamente las comunidades realizaron asambleas para elegir a los delegados que hoy votan para escoger a los diputados.
El proceso electoral fue cuestionado por la Organización de Estados Americanos (OEA) y la Unión Europea (UE), que no ven esos comicios como democráticos ni transparentes.
Además, los opositores que actualmente controlan la Cámara no acudieron a las elecciones al considerarlas un fraude que buscaba, aseguran, legitimar al Ejecutivo de Nicolás Maduro, al que tachan de dictadura.
No obstante, sí se han presentado algunos de los partidos más grandes de la oposición, previamente intervenidos por el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), que además nombró directivas impuestas para que concurrieran a los comicios.