* Diversos sectores exigen investigar atribuciones legaloides del presidente de la Jucopo, Alfredo Sánchez Esquivel, «priísta trasnochado que llegó a Morena a ofender a la militancia, a la comunidad indígena y al pueblo de Guerrero», según lo describe Rubén Cayetano García, exlegislador federal por el Distrito 8 de Ayutla, que de paso exige una investigación a fondo del usurpador de la curul que corresponde a los pueblos indígenas.
ACAPULCO, Gro. * 9 de agosto de 2022.
) Especial
No obstante presumirse un político respetuoso de las leyes, desde su unción como diputado plurinominal, Alfredo Sánchez Esquivel no ha dejado de ser blanco de noticias adversas, las cuales contradicen su honesto actuar como presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso de Guerrero (Jucopo), comisión seriamente cuestionada hasta por los mismos diputados de Morena, dada las acciones y atribuciones legaloides que su presidente ha implementado al margen de la ley.
Sánchez Esquivel, por ejemplo, ha aceptado con reiterado cinismo ostentar una curul que no le corresponde porque esta le fue arrebatada a Yesenia Hernández Jerónimo, una joven de origen me’phaa de la región de la Montaña, argumentando que él no la pidió, sino que se la dieron… y, pues, «gustoso» la aceptó, pese a que en la región que representa no se le reconoce como indígena, ya que «no habla ninguna lengua originaria, no pertenece a ningún grupo social étnico e, incluso, sus rasgos físicos no son propios de una persona mestiza», si no todo lo contrario, sostienen integrantes del Concejo Municipal Comunitario y el Concejo de Seguridad y Justicia de Ayutla.
El mismo caso ha ocurrido con el flagrante nepotismo que infringe al tener como suplente a su esposa, Zazil Meza Fernández. No obstante, el presidente de la Jucopo Guerrero también ha dicho que él no la puso, sino quienes asignaron las diputaciones por equidad de género, por lo que, al respecto, él no comete delito alguno. Es más, ha dicho que defenderá la suplencia de su esposa porque ella lo ha «apoyado mucho» y que, aunque reconoce el nepotismo existente, no puede hacer nada porque Zazil Meza sí trabaja y se la merece, además de que por unanimidad los magistrados del Tribunal Electoral del Estado (TEE) desecharon hace tiempo la impugnación de Yesenia.
El actuar cínico y deshonesto del legislador por Morena parece no tener límites.
Por su probada inteligencia pero capacidad de traicionar, robar y mentir, Rubén Cayetano García, ex legislador federal por la región de la Costa Chica, es quien mejor describe «al priísta trasnochado que llegó a Morena a ofender a la militancia, a la comunidad indígena y al pueblo de Guerrero».
Por haberse apropiado de una curul que no le corresponde, en complicidad con la Secretaría de Asuntos Indígenas que le expidió un documento para validar su fraude, Cayatano García escribió textualmente en Facebook:
«Me deslindo de las prácticas de Alfredo Sánchez Esquivel, priísta trasnochado 
que llegó a Morena a ofender a la militancia, a la comunidad indígena y al pueblo de Guerrero, al robarse en despoblado una diputación por reeleción vía plurinominal, con su esposa de suplente y, por si fuera poco, haciéndose pasar por me’phaa.
«No soy cómplice de estas prácticas, por lo que pido se investigue al Secretario de Asuntos Indígenas y Afromexicanos del Gobierno de Guerrero, Javier Rojas Benito, al expedir un documento que se utilizó para fines electorales reeleccionistas y antidemocráticos; pero 
también que se sancione a los dirigentes estatales y/o nacionales de Morena que hayan solapado y permitido estos procedimientos desonrosos para nuestro movimiento.
«Ratifico que sin ningún titubeo nosotros nos guiamos bajo los principios de no mentir, no robar y no traicionar al pueblo», principios que, evidentemente, Sánchez Esquive en los hechos no profesa.
Y es que Alfredo Sánchez Esquivel ha sabido librar cada acusación en su contra, motivo por el cual legisladores de oposición y organizaciones civiles y de gobierno autónomo se han sumado al llamado unísono para que se investiguen todos los señalamientos que pesan sobre el presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso del Estado, entre los cuales destacan de último momento las intromisiones a la
Policarpo Gatica
vida interna de órganos independientes como la Comisión Estatal de los Derechos Humanos, según Policarpo Gatica Ramírez, representante de trabajadores de esa Comisión, y el mismísimo Concejo Municipal Comunitario y de Seguridad y Justicia de Ayutla de los Libres, donde sus integrantes han denunciado que Sánchez Esquivel se ha aprovechado de su fuero para contradecir el modelo autónomo de gobierno de esa región y no pierde oportunidad para «criticar de manera negativa” las decisiones de estos consejos regionales con evidente fines electorales, pues desea imponer a su esposa como candidata a la presidencia municipal de Ayutla en 2024 aunque ambos, ni ella ni él, gozan de ninguna representatividad en la región ni municipio.
A pesar, también, de que se presume respetuoso de las decisiones internas del partido que representa en el Congreso, Alfredo Sánchez ha sido señalado de patrocinarle a la Gobernadora Evelyn Salgado Pineda y a su padre, el Senador Félix Salgado Macedonio, grupos de confrontamiento y movimientos para restarles presencia y credibilidad en el ámbito electoral y político del estado.
El diputado con licencia Jacinto González Varona acusó que en la pasada elección interna de Morena para renovar directiva estatal fueron utilizados artículos electorales presuntamente pagados con recursos del Congreso del Estado. Y aunque Sánchez Esquivel sintió la pedrada se sacudió la alusión exigiendo que quien tena pruebas presente una denuncia ante las instancias correspondientes. No obstante, sí aceptó que con recursos públicos se han adquirido materiales diversos para socorrer a personas necesitadas de municipios donde, curiosamente, Sánchez Esquivel y su grupo cercano hacen actos de presencia promoviendo su imagen con evidentes fines electorales de cara al 2024, lo cual el acto se convierte un flagrante delito de carácter electoral.
Gabriela Bernal Reséndiz, presidenta de la Comisión de Género de la LXIII Legislatura, a propósito, no ha sido la única legisladora de oposición que ha denunciado presión por parte del presidente de la Jucopo para silenciar las voces críticas del Congreso del Estado. Durante el Día Internacional de la Mujer, Sánchez Esquivel intentó impedir la participación de algunas diputadas dispuestas a arremeter contra Morena y su régimen federal contra las mujeres, fomentando así el machismo y los feminicidios en México y el estado.
Gaby Bernal.
En pocas palabras, Bernal Reséndiz contradijo la democracia y el respeto que tanto cacarea el presidente de la Jucopo hacia la vida interna del Congreso y los miembros de los grupos parlamentarios representados en la LXIII Legislatura.
No es para menos que el Concejo Municipal Comunitario y el Concejo de Seguridad y Justicia de Ayutla rechace «enérgicamente que personas que no corresponden a los pueblos originarios pretendan usurpar esa identidad, y mucho menos que ocupen una curul en el Congreso del Estado», aludiendo francamente a Alfredo Sánchez Esquivel, a quien acusan de estar abusando de la Consulta a los Pueblos Indígenas y Afromexicanos para promoverse con evidentes fines electorales, haciendo gala de dádivas que deben ser investigadas sus procedentes porque pareciera que Sánchez Esquivel es todo menos lo que dice representar, pues se ha alejado mucho de su deber legislativo para dedicarse a hacer política, grilla y promoción electoral a costa del Congreso del Estado, lugar donde se necesitan «personas que esté comprometidas con impulsar leyes», no personajes que usurpar el poder y pisotea la ley discrecionalmente para sus intereses políticos.
