* Arcos Catalán sí contaba con seguridad persona, seguridad estatal y federal
CHILPANCINGO, Gro. * 7 de octubre 2024.
) Especial
Mientras las lágrimas continúan por la muerte dolosa del exalcalde de Chilpancingo, Alejandro Arcos Catalán, siguen fluyendo datos que aseguran que Arcos, previo a su desaparición, sí recibió avisos que comprometían su integridad física. No obstante, nunca pidió seguridad al estado porque, a diferencia de su exsecretario general de gobierno, Francisco Tapia, asesinado dían anteriores, él sí contaba con elementos estatales y de la Guardia Nacional que lo custodiaban.
Aunque para mucho su muerte es un misterio, hay diversas líneas que apuntan directamente al crimen organizado, pues la forma en que dejaron visible su cabeza es una señal de poderío de los grupos criminales que operan en Chilpancingo, los cuales lograron doblegar a su antecesora Norma Otilia Hernández Martínez, a quien el propio ex mandatario nacional, Andrés Manuel López Obrador, mandó investigar luego de ser balconeada degustando con el capo mayor de Los Ardillos, Celso Ortega Jiménez, grupo criminal que controla la capital del estado y la diputa con otras células delictivas como Los Tlacos y el Cartel del Valle del Ocotito o Cartel del Sur, con quien algunas página de Facebook vincularon en su momento a Arcos Catalán con los mandos superiores del mismo.
Su alianza con Norma Otilia Hernández fue pública y evidente; grupos operativos de la excaldesa participaron activamente en la campaña de Arcos Catalán, lo que podría haber sido un factor de su ejecución, pues Alejandro Arcos jamás quiso aceptar diálogo con los delincuentes que lograron controlar el gobierno de Otilia Hernández, lo que pudo desencadenar en que lo hicieran pagar por su insubordinación.
Expertos en crímenes dolosos dan fe que la forma brutal en que lo ejecutaron y la forma abominable en que expusieron su cabeza en un vehículo que no era de su propiedad es una forma de advertir quién manda en Chilpancingo y qué les pasa a los que desobedecen
Sobre las versiones de que Arcos fue asesinado por falta de seguridad de parte del gobierno el estado, quien supuestamente le negó protección, son falsas, pues el mismo dirigente estatal del PRD, Mario Ruiz Valencia, aseguró que el exalcalde contaba con custodios de la Policía Estatal y la Guardia Nacional.
Lo que ocurre con esta versión que se ha tergiversado, es que en entrevista con medios nacionales Alejandro Arcos admitió que tras el homicidio de su ex secretario gobierno no le hubiese parece bien ayuda extra para él y su equipo de trabajo, pero jamás culpa ni a la gobernadora ni al Gobierno del Estado de haberle negado protección.
Aquí, las imágenes que comprueban los dichos del líder estatal perredista: