] México. * 6 de agosto.
El abogado que representa a las víctimas del accidente de avión ocurrido en diciembre de 2012, está seguro de que no se trató de un atentado.
Desde el 9 de diciembre de 2012 (día en que murió Jenni Rivera), muchos se preguntan si el deceso de la Gran Señora fue un accidente o un atentado, la duda sigue vigente en muchos a excepción Vance Owen, abogado que representa a las víctimas en una demanda contra las compañías Starwood Management LLC, Rodatz Financial Group, la corporación de California Jenni Rivera Enterprises Inc., y quien asegura que el causante del avionazo fue un tornillo.
Así lo dio a conocer en una entrevista con #LMShow donde aseguró que investigaciones de la Agencia Federal de Aviación de EEUU (FAA) en conjunto con la Dirección General de Aviación Civil mexicana descubrieron que «un tornillo que controla el elevador, que es como un volante del avión, tuvo un problema».
«Ese tornillo fue estudiado bajo microscopios por la FAA y por decisión del gobierno mexicano que tiene la DGAC y la Dirección General de Aviación Civil. Ellos, como equipo, piensan que fue la causa de esta tragedia, y la pérdida de control que causó que el avión se fuera derecho hacia el suelo», dijo.
Y descartando que se trató de un atentado, añadió: «no encontraron ninguna pólvora ni ningún elemento químico que dictara que fuese una explosión».
Cabe mencionar que de resultar responsables las empresas que las víctimas demandan, éstas tendrán que pagar una compensación a la dinastía Rivera así como a las víctimas entre las que se encuentran: Arturo Rivera, Mario Macías, Jacobo Yale y Jorge Armando Sánchez.
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