«Correctiva» porque si no cumplen con las normas del complejo y sus obligaciones de «inquilinos» les colocan la «macuca», la cual impide que den pasos o saltos agigantados, ya que con cada ‘estirón’ la cadena hala de los testículos de modo tal que duele más que una patada justo «allí» donde se unen las entrepiernas.

«Preventiva» porque solo con la «macuca» todos los conscriptos AA no intentan escaparse, pues la cadena de escasos 30 centímetros que une pies, manos y testículos hace casi imposible poder moverse. Un tirón en falso o un paso mal articulado es fatal.

Dicen que quienes han logrado salir de ese mini-reclusorio de auténtica tortura para alcohólicos ‘sin remedio’ han vuelto a ser «ciudadanos de provecho, ejemplares», por eso es que, entre «mitad en broma y mitad en serio», algunos moradores de Piedra Roja le han gritado a algunos políticos que los visitan solo en tiempos electorales que si no les cumplen los van a cazar para ponerles una «macuca», a ver si «se componen y dejan de andar robando y engañando a la gente».

¡La idea no es tan descabellada!
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