] USA. * 6 de abril.
La séptima entrega de la franquicia de Rápido y Furioso seguro llama la atención por la manera en que se espera que lidie con la muerte de Paul Walker. Pero, más allá de la tragedia fuera de cámaras, ¿vale la pena correr a los cines para ver la película? Aquí lo que dicen los críticos:
Peter Travers, Rolling Stone: Furious 7 es la mejor película de la franquicia, dos horas de puro poder alimentadas de dedicación y de un corazón apasionado. Este filme se queda contigo. Las fallas usuales —problemas con la trama, personajes musculosos actuando, diálogos del tamaño de un tuit— se desvanecen con la camaradería dentro y fuera de la pantalla. El final de la película, en honor a Walker, sacó lo mejor de cada uno de nosotros. Es raro ver a Walker en acción, pero también es agradable verlo tomar un volante o observarlo mientras cuelga de un autobús en un acantilado en Azerbayán. Él se siente como en casa.
Chris Nashawaty, Entertainment Weekly: Ninguno de nosotros da 10 dólares para ver una de estas películas por su lógica. Vamos para ver la destrucción y la ola de demolición en ella. Furious 7 entrega eso como si fuera el impulso visceral que da una inyección de adrenalina. Por dos horas y ‘cacho’ somos llevados a una orgía de ocho cilindros con algunas de las escenas de acción más emocionantes vistas en un filme, incluyendo una que se lleva el show en donde Walker se balancea en un autobús que está por caer de un acantilado.
Chris Ziegler, The Verge: Es completamente posible que mi fanatismo me cegara ante la grandeza de Furious 7. Las secuencias de acción —en particular en Abu Dhabi, con un súperauto saltando entre edificios— son fenomenales; y las escenas grabadas tras la muerte de Walker, en las que aparecen sus dos hermanos, nunca distrajeron o fueron obvias, a menos que te fijaras cuidadosamente. Tal vez me estoy perdiendo de algo.
A.O. Scott, The New York Times: Los momentos finales, cuando los colegas de antaño de Walker se despiden mientras él todavía aparece en escena, son conmovedores y extraños. Te recuerdan que el significado de estas películas, tras el ruido y la valentía, es la ferocidad de la amistad y la terrible velocidad de las pérdidas.
Betsy Sharkey, Los Angeles Times: Las secuencias de acción —desde los combates mano a mano, hasta las explosiones y choques de autos— son, como hemos esperado, poco reales. Las acrobacias basadas en ‘parkour’ de las que todos estarán hablando afectan particularmente porque: a) Muestran al auto multimillonario, con joyas incrustadas y de edición limitada, Lykan Hypersport y b) Son maravillosas. Todas las caídas y el paracaídismo caen en la categoría de «no haga esto en casa».
Richard Lawson, Vanity Fair: La última película, que se estrenó el viernes pasado, no puede evitar tener un significado más profundo al haberse presentado la muerte de uno de sus protagonistas, Paul Walker, en un accidente de auto en 2013. Pero esto no abruma, Furious 7 es respetuosa, e incluso solemne cuando debe serlo, pero aún tiene mucha diversión, gracias a Dios.
] CNN