CIUDAD DE MÉXICO. * 18 de enero de 2022.
) Especial.
El anuncio realizado por la Cancillería de las 16 designaciones de nuevos titulares, hechas por el presidente Andrés Manuel López Obrador para Representaciones de México en el Exterior, evidencian la poca seriedad con la que ven el mundo y la nula importancia de las relaciones internacionales, así como de la implementación de la política exterior.
“Los nombramientos hechos por el presidente para algunas representaciones en el exterior son lamentables puesto que claramente tienen un tinte político, olvidándose del Servicio Exterior Mexicano”, aseguró Mariana Gómez del Campo, Diputada Federal.
En la lista aparecen nombres que no tienen ninguna experiencia diplomática ni consular. Es lamentable que el Servicio Exterior Mexicano esté siendo subordinado de esta manera. “Leer nombres como el de Claudia Pavlovich, Miguel Aysa, Leopoldo de Gyves y Laura Esquivel, deja en evidencia que se están utilizando las Embajadas y los Consulados como premios al entreguismo y a la lealtad a ciegas a López Obrador”, señaló la también Secretaria de Asuntos Internacionales del CEN del PAN.
Es por eso que a pesar de que la Cancillería anunció que para el caso de las Embajadas ya solicitó el beneplácito a los países de adscripción, para no repetir el error que tuvieron con España, “desde Acción Nacional hacemos un llamado para que en el Senado de la República se revisen a fondo los perfiles de las designaciones de nuevos titulares, especialmente en los casos del Consulado de Barcelona y las Embajadas de Brasil, Panamá, República Dominicana y Rusia”, aseveró la Vicepresidenta de la Organización Demócrata Cristiana de América (ODCA).
Asimismo, la Diputada Federal externó que, desde el Partido Acción Nacional, “manifestamos nuestra total desaprobación y preocupación sobre los perfiles que se están enviando a las Embajadas de Nicaragua y Venezuela, al ser personajes sin experiencia diplomática y porque en estos países se vive bajo dictadura y en una violación sistemática de los derechos humanos”, concluyó Gómez del Campo.