Respalde quien respalde la línea de crédito de 158 millones de pesos solicitada por el Gobierno de Acapulco al Grupo Financiero Interacciones para cubrir deudas con el ISSSPEG e Infonavit, así sea el SUSPEG, Batman o Supermán, si no está en contexto con la ley, todo respaldo, como el crédito, es ilegal, indebido e incongruente, pese a quien le pese.
Si el Gobierno de Acapulco está limpio de pecados, lo justo es que se castigue penalmente a todos los responsables de dichas deudas heredadas con todo el rigor de la ley, sólo así demostrará la presente administración su inocencia y transparencia.
Una vez actuado el Gobierno de Acapulco contra los endeudadores ancestrales del municipio, entonces sí es procedente el respaldo legítimo de la misma sociedad y del SUSPEG, pues son los agremiados y las prestaciones sindicales de esta agrupación los más afectados.
La intención del SUSPEG es buena, más si las ‘negociaciones’ fueron favorables, pero dicha acción, dicho respaldo, no es el correcto, sobretodo si se pretende legitimar un hecho aún cuestionable y al margen de la ley.
«A Dios lo que es de Dios y al César lo que es del César».
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