E d i t o r i a l
Finalmente, los intereses de las mafias políticas que operan en México, como acertadamente asegura el máximo exponente de las izquierdas del país, Andrés Manuel López Obrador, se impusieron en Guerrero.
Después de algunos «berrinches» simulados contra la imposición del Mando Único Policial (MUP) creado por Enrique Peña Nieto para controlar las policías de toda la República y acusado de estar infiltrado por el narcotráfico y el crimen organizado, según indagaciones propias del Cisen, organismo dependiente de la Secretaría de Gobernación federal, el personaje que cobra como gobernador, Héctor Astudillo Flores, terminó por aplaudir este día la «solidaridad» del gobierno federal en materia de seguridad pública, violentando la autonomía estatal consagrada en la Constitución Política del Estado Libre y Soberano de Guerrero.
Pero así es Héctor, y no cambiará. Mientras su avaricia de dinero y poder sean el único móvil que manipule su conciencia, es capaz de reptarle no solo a Miguel Ángel Osorio Chong, sino a todo aquél que toca las fibras sensibles de sus ambiciones políticas, así sea pisoteando las leyes o los derechos humanos y constitucionales de sus coterráneos. Y que no diga que son blasfemias, porque del dominio público son evidentes sus antecedentes.
Ni modo. El orden y la paz tan cacareada de Héctor seguirá siendo una realidad solamente en los panteones del estado.
Lástima.
Pareciera que algunos guerrerenses no aprenden ni a “chingadazos”, siempre se están quejando de todo y cada tres y seis años eligen los mismos males que luego reprochan.
Bien dicen que Dios nos dio libre albedrío, para que luego no nos quejemos de nuestras decisiones.
Independientemente de las reptadas de Astudillo a Osorio Chong y Peña Nieto, algo no puede ocultar el que cobra como gobernador de Guerrero: «Que con sus aplausos de foca solo anuncia su aceptación como ariete político de Los Pinos para frenar a toda costa las aspiraciones del alcalde de Acapulco, Evodio Velázquez Aguirre, quien con lo que puede está poniendo su mejor esfuerzo por mejorar la imagen del puerto, además de que el futuro lo vislumbra como fuerte contendiente a la gubernatura de Guererro en el 2021.
Lamentablemente, la intromisión del Gobierno Federal en Acapulco también levanta sospechas… como que hay intereses mucho más fuertes que la seguridad publica que Evo Velázquez está obstruyendo con su rechazo al Mando Único Policial (MUP) de Peña Nieto… todos sabemos «más o menos» de qué se trata. Pero «chitón», las balas andan sueltas en todo Guerrero y los «accidentes» están a la orden del día, es mejor hacerse de la «vista gorda» y continuar sobreviviendo.
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