* Rehúye AMLO debate con Yunes con excusa infantil
* Filtran audio de supuestas negociaciones AMLO-Duarte
* La pregunta del millón: ¿Por qué ni el hermano de AMLO vota por Morena?
El Brujo Chiripero
«No puedo ir al debate porque en una de esas hasta pierdo mi cartera» respondió ayer, jueves, el aspirante presidencial del Movimiento Regeneración Nacional (Morena), Andrés Manuel López Obrador, al gobernador de Veracruz, Miguel Ángel Yunes Linares, quien lo retó a debatir aprovechando su gira por esa entidad, y en cuyo debate le presentaría públicamente las pruebas de su corrupción, incluyendo los documentos y audios probatorios de los 2.5 millones que recibía de Javier Duarte y los millones de pesos que recibe su partido de manos del Instituto Electoral de la entidad.
¿Pues no que «quien nada debe nada teme»?
¿Así se comporta El Mesías del 2018 que rescatará a los mexicanos de la pobreza, marginación social y la violencia a manos del narcotráfico y el crimen organizado?
No es la primera vez que Súper AMLO rehúye de la luz y la verdad.
Yunes no es un santo, ni lo será. AMLO tampoco está libre de pecados, desgraciadamente su fanaticada siempre está presta a expiarlo y beatificarlo cuantas veces sean necesarias. No, no es que «no (sepan) lo que hacen», los hacen conscientes de que no hay políticos santos y que AMLO no es un santo, mas bien, un santurrón. Pero así es la política.
«Ya nos merecemos un buen presidente», dicen sus seguidores en la página oficial de AMLO en Facebook. ¿Será que es verídico el dicho de que «no hay peor ciego que el que no quiere ver»?
El pasado corrupto, simulador y hasta nepotista del Mesías de Tabasco está igual de enfangado que el de los que critica, pero así es la política de «marrana», y así son ALGUNOS, ALGUNOS, ALGUNOS fanáticos de la política: tercos, obcecados e irrazonables.
Si AMLO es el «presidente que merecemos» y el Mesías que salvará a México de la opresión en 2018, ¿cómo se explica que ni su propio hermano. Arturo López Obrador, vota por Morena, como ocurrió en 2016 en Veracruz?
AMLO no solo da risa con sus excusas infantiles para rehuir el debate con Yunes, nos recuerda a los progenitores de la humanidad, Adán y EVa, quienes culparon a la Serpiente de su desobediencia a Dios. Está comprobado que como ellos hay muchos, sobretodo en la política.
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