] Acapulco Press.

Parece que el PRI no aprendió nada de la imposición de Félix Salgado en Morena; parece que le importa poco ganar Acapulco. Caso contrario, apostaría por un candidato más competitivo, propositivo, comprometido y aceptado por la mayoría de los acapulqueños, con estructura, equipo humano y fuerza suficiente para medirse con quien sea; con propuestas serias y confiable, con valores y principios que no permitan cuestionamientos de corrupción ni antecedentes sospechosos como servidor público o representante popular.

Imponer a Ricardo Taja como candidato de la Coalición PRD/PRI a la Presidencia de Acapulco les puede costar caro a ambos partidos. Taja no tiene trabajo de campo desde 2018, año que lo marcó como un ‘candidato cobarde’ al rehuir a cuanto debate era retado o invitado para ver quién tenía mejores las propuesta para Acapulco. Lo más trascendente de aquella nostálgica campaña fueron su título falso y los presuntos nexos con el crimen organizado que acusó el candidato de la coalición PRD/PN/MC, Joaquín #JAcko Badillo Escamilla, pero en propuestas le salió debiendo hasta los de su casa, pues aunque repartió ‘dinero sospechoso’ a manos llenas, amarga fue su derrota. Hoy solo sus parientes y algunos soñadores seguidores lo aclaman de nuevo como candidato. Su registro, el pasado sábado, sirva de base a este comentario.

Según datos del INE, en la Región Acapulco el PRD tiene más presencia que el PRI; el PRD tiene mejor estructura, más militancia y un candidato que hoy por hoy es más fuerte y competitivo que Ricardo Taja.

Víctor Aguirre quizá no sea el mejor candidato para vencer por sí solo a Morena, AMLO y la 4T juntos, pero posee lo que a Taja le falta: «¡Valor para enfrentar el reto de pelear al tú por tú la presidencia de Acapulco con quien le manden… y sin rajarse!»

Víctor Aguirre no necesitó ser impuesto, palomeado o apadrinado para ganarse su candidatura; Víctor Aguirre no esperó a que lo bendijeran para comenzar a hacer trabajo. Cuando se propuso buscar gobernar Acapulco y darle futuro a los acapulqueños, con nuevas propuestas reales y de corto alcance, comenzó a trabajar a ras de pueblo, colonia por colonia, barrio por barrio, sudor gota a gota, y fue así como poco a poco diversos sectores de la sociedad se le fueron acercando hasta aceptarlo y proclamarlo el mejor candidato que  hay por el momento para recuperar a Acapulco de manos de los oportunistas, los simuladores, los traidores y los corruptos disfrazados de ovejas que en dos años han acabado no solo con las esperanzas de los mexicanos, sino que han pisoteado y exterminado todo lo poco bueno que le quedaba al pueblo: salud, bienestar, economía y ganas de un México mejor.

Taja Ramírez pareciera ser la reencarnación perfecta de Adela Román Ocampo, pero en versión compacta: «Promete mucho, pero cumple casi nada. Exuda soberbia a flor de piel; no le gusta el vulgo, su mundo es de élite, clasista y sectarista».

A Ricardo Taja le gusta que le ministren, que lo mimen, que le consientan sus caprichos… con esos dotes, ¡difícilmente podrán PRI y PRD recuperar Acapulco! A Taja le ganaría Morena de nuevo hasta con Abelina o ‘Jacko’ de candidatos.

Creemos que tiene razón Víctor Aguirre al apresurar al PRI a definir la candidatura de la alianza #VaXAcapuco.

Sería una decisión sabia de Mario Moreno avalar a Víctor Aguirre Alcaide como el ‘candidato de unidad’ de la coalición PRI/PRD, pues en cada concentración que el PRD le ha organizado a Mario en sus estructuras territoriales, la ola y las banderas amarillas han demostrado su poderío a grado que tal que los aspirantes priístas a diversos puestos de elección popular han quedado minúsculos ante la fuerza de los perredistas, hecho que el mismo Moreno Arcos ha atestiguado, en ocasiones, sin palabras.

Hasta hoy, es la fuerza del PRD la que se ha impuesto en diversas regiones donde el abanderado del PRI a la Gubernatura de Guerrero se ha presentado. Es por esta justa razón que, concordando con Víctor Aguirre, el PRI no deben pensar más en ‘premios de consolación’ ni en ‘complacencias de caprichos’ para Ricardo Taja, pues la coalición PRD/PRI tiene ya un candidato que en teoría y práctica «no se ha rajado» a nada y sigue dando batalla frontal por demostrarle a los acapulqueños por qué quiere gobernar Acapulco: ‘no para cumplir un sueño –como Adela Román y tantos otros que han gobernado–, sino porque Acapulco y los acapulqueños merecen ya un gobierno humano, cercano a la gente, con futuro… y hoy por hoy, guste o no, arda o cause escozor, quien pude llevar a cabo este objetivo se llama Víctor Aguirre Alcaide. Si no fuera así, no se sumarían día a día más sectores sociales y hasta militantes de otros partidos a su proyecto de gobierno.

Nadie en en la presente elección hace trabajo de campo compartido; Víctor Aguirre y el PRD han compartido sus estructuras y territorios a Mario Moreno cabalmente. No ha habido evento del PRD donde a Mario no se le respete o se le minimice por ser del PRI. ¡Al contrario! El mismo Evodio Velázquez Aguirre, de la misma forma que lo ha hecho Víctor Aguirre, han antepuesto todo por aclamar a Mario Moreno Arcos como el mejor candidato de la coalición PRD/PRI que gobernará Guerrero, con la entrega y suma de las fuerzas perredistas y priístas el próximo 6 de junio.

Honor a quien honor merece: Lo dicen los sectores diversos de la sociedad que se han sumado a su proyecto; lo dice gran número de acapulqueños; lo reconocen los mismos priístas y lo aclaman, desde luego, las bases perredistas: «¡Víctor Aguirre Alcaide debe ser el Candidato de Unidad de la Coalición PRI/PRI a la Presidencia de Acapulco!».

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