] El Brujo Chiripero

Donald Trump aun no asume la presidencia de Estados Unidos, ni se ha deportado a ningún mexicano tampoco, pero el Gobierno de Enrique Peña Nieto ya firmó un acuerdo con el Consejo Coordinador Empresarial de México (CCE) para «tratar» (ni siquiera es una garantía) de dar empleo a todos los compatriotas desechados por el gobierno de Trump. Así lo dijo hoy con mucho énfasis el secretario de Gobernación federal y «portavoz personal» de Peña Nieto, Miguel Ángel Osorio Chong.

Aunque durante los últimos días de su campaña el señor Trump recompuso su ‘amenaza’ y aludió deportar solamente a toda la sarta de haraganes y delincuentes latinos de su país, para darle prioridad a los estadounidenses en materia de asistencia y seguridad social, entre otras cosas, Peña Nieto de inmediato se erigió salvador de «todos los mexicanos», sin excepción (incluidos los delincuentes, parece ser) que sean deportados de Estados Unidos… a partir de enero próximo, después de que Donald Trump oficialmente asuma la presidencia de Estados Unidos.

Aquí es donde cabe la pregunta: «Era necesario que un presidente electo de otro país lanzara una amenaza velada para que México asumiera su responsabilidad social y política para evitar tanta migración de compatriotas que se van a Estados Unidos en busca de la vida que su país les niega?».

Era necesario que se ahogara el niño para mandar a tapar el pozo?

Al final de cuentas, Trump solo hace lo que todo duelo de su casa haría: cuidarla de los inquilinos o intrusos indeseados, malvivientes o morosos… usted no lo haría?

No se trata de defender al señor Trump, se trata de hacer conciencia, de no hacer tanto el ridículo. Al final de cuentas vivimos en México, quien está fallando es México, a quien debiéramos enjuiciar es a nuestro presidente por desatender u omitir su responsabilidad política y social con los mexicanos, que obliga a muchos compatriotas a irse al extranjero en busca de mejores condiciones de vida.

Digo! Así lo veo yo… finalmente, usted tiene su propio punto de vista y la última palabra, al respecto.

Del supuesto racismo que tanto le reprochan al señor Trump podríamos hablar después, aunque tampoco es necesario cruzar la frontera para enseñarle a Trump modales, recuerdan el racismo de la hija de Peña Nieto, Paulina Peña Pretelini, que ve a la «pendeja prole» mexicana como un raza inferior a los Peña?

De misoginia ni se diga, tenemos también un payaso de greñas verdes que ve a las mujeres como objetos de tercera y se mofa de nuestras féminas en cadena nacional cuantas veces le pega la gana y nadie se inmuta ni patalea, sino todo lo contrario: a este payaso que pendejea hasta al mexicano más encumbrado y acaudalado se le cree casi todo, se le aplaude y hasta se le reconoce como uno de los mejores conductores de televisión de nuestro país

No cabe duda que los mexicanos somos chingones en eso de ver la paja en el ojo ajeno, pero nos negamos a mirar la viga que hay en los nuestros.

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