Venganzas y represalias, en lugar de trabajo, respuesta de Abelina López a reclamos
* ¿De veras convienen a Acapulco tres años más de insolencia e incapacidad?
Sin daños a terceros
» ÁNGEL | BLANCO
massiosare@msn.com
) Facebook / Angel Blanco
En lugar de responder con trabajo para taparle la boca a sus detractores que con justa razón demandan de su alcaldesa trabajo, responsabilidad y atención a los problemas y necesidades más apremiantes de su municipio y gobernados, Abelina López Rodríguez responde con represalias y venganza.
Así lo demostró al ordenar a la dirección de Recursos Humanos retener los salarios de un trabajador supernumerario y siete de lista de raya identificados con Ramiro Solorio Almazán, el ‘Brother’, quien ha señalado constantemente el deplorable estado en que se halla Acapulco en todos los sentidos y aspectos, a grado tal que el mismísimo exgobernador Zeferino Torreblanca Galindo llegó a compararlo con una «pocilga» y un «retrete».
La «acción cobarde» de la alcaldesa morenista que pretende reelegirse en 2024, de mandar retener el salario de quienes nada tienen que ver con sus desobligaciones u omisiones constitucionales que provocan el encono de los ciudadanos, fue calificado por Solorio Almazán como una «evidente venganza política» por haber estado «señalando sus actos de corrupción».
Los afectados, que se plantaron en el ayuntamiento y la costera Alemán, además de la casa de la presidente, para demandar el pago de su quincena laborada, son empleados de apoyo de la regiduría de Brenda Hernández Marino, identificada con el grupo de #SoyTuBrother Solorio, quien contendió por Movimiento Ciudadano Acapulco para la alcaldía de Acapulco en 2021, por lo que el mensaje de suspender los salarios de los trabajadores en cuestión, es una evidente venganza para Ramiro Solorio, quien en su función de ciudadano ha documentado denuncias de corrupción contra Abelina López en diversos rubros de obras públicas adulteradas a las que su gobierno le ha etiquetado miles de millones de pesos que no cuadran con las dimensiones de las mismas.
Ejemplo de ello están el kiosko de la ciudad, que fue realizado con 15 millones de pesos gestionados por el regidor Genaro Vázquez Flores y el cual luce ahora infestado de vendedores ambulantes solapados por el gobierno de López Rodríguez. También figuran un pedazo de banqueta en la costera Miguel Alemán en el área de La Condesa, que costó al erario 17 millones de pesos, así como un parque incluyente que nadie visita pero fue etiquetado con 21 millones de pesos.
Abelina López se halla ocupada, por el momento, en pagar millones de pesos en su imagen para promover su reelección, mientras Acapulco se halla convertido literalmente en una «pocilga» y «retrete», como acertadamente señaló Torreblanca Galindo cuando, coincidiendo con Ramiro Solorio y decenas de acapulqueños inconformes, espetó la falta de responsabilidad y oficio de la alcaldesa que durante toda su carrera como lideresa de colonias ha cacareado que «con cargo o sin cargo sí cumple».
La Doctora en Derecho por el Colegio Nacional de Matemáticas en Acapulco (Conamat) debería estar consciente que en el caso de los sueldos retenidos a ocho trabajadores identificados con el grupo de Ramiro Solorio, los salarios de los trabajadores son «inenbargables», tal como estipulan los Artículos 110 y 112 de la Ley Federal del Trabajo, por lo que su cobarde actitud raya en un flagrante delito por el que podrían fincarle responsabilidades laborales y administrativas al amparo de la Ley de Responsabilidades de los Servidores Públicos.
La pregunta obligada es: Si esto hace con sus trabajadores, solo por estar vinculados a un ciudadano que reclama trabajo honesto de su alcaldesa, ¿qué haría Abelina López, que prometió «cero corrupción y cero nepotismo», pero tiene su gobierno plagado de corrupción y nepotismo y se presume honesta y humanista, contra los acapulqueños que reclaman, denuncian y exigen servicios básicos, si pudiera tomar venganza y represalia contra ellos?
Para nadie es un secreto que, además de la inseguridad que no ha querido afrontar, Acapulco padece de muchos males que en su afán de conquistar el voto Abelina López se comprometió erradicar y/o resolver en año y medio… ya va de salida, y Acapulco sigue igual como se los dejaron sus antecesores. Los únicos cambios son los estilos de vida de su grupo allegado y los ligandos sentimentalmente a su persona (léase Leticia Lozano Zavala, secretaria del Bienestar Acapulco, y parientes).
En su afán de continuar en el poder tres años más, a la alcaldesa relacionada aún con dos marinos desparecidos, Acapulco se ha ido convirtiendo en muladar público. Y no solo eso, las aguas residuales confluyen hasta en las zonas turísticas visitadas por miles de turistas que en temporadas vacacionales eligen el puerto para vacacionar… pero se retiran desilusionados por la peste e insalubridad de la «pocilga» y «retrete» en que tiene convertido Abelina López el Acapulco que cínicamente pretende seguir gobernando a partir del 2024.
No es una voz, son miles las que al unísono le piden que no derroche miles de millones de pesos en mentiras pagadas en los medios para rendir culto a su imagen; más bien, consideran justo que esos millones que se emplean hasta en páginas falsas de redes sociales sean empleados en obras de verdadero impacto y servicios vitales que desde el inicio de su gestión siguen siendo demandados por los acapulqueños.
¿Y cómo ha respondido Abelina López a todos estos reclamos?
En los casos donde puede, como con los allegados de Ramiro Solorio, ¡con venganzas políticas y represalias!
En el caso de los acapulqueños, con omisiones deliberadas que rayan en flagrantes delitos de irresponsabilidad constitucional.
¿Qué ofrecerá Abelina López para reelegirse en 2024?
¿Atender, ahora sí, el desabasto de agua; el desabasto de recolección de basura; reparar los baches que se multiplican en las calles del puerto, alumbrar las calles y playas en penumbras; combatir la corrupción y el nepotismo que merme en su propia administración?
Con acertada razón preguntó el periodista Eduardo Ruiz-Healy, cuando Abelina López incursionó en el mundo de la comedia política hablando del ‘trailer que se condujo solo’ en la Autopista del Sol y ‘la calor’: “¿De qué agujero sacaron a la hoy presidenta municipal de Acapulco?”… pregunta que, quizá, comparten casi todo los acapulqueños asqueados de su fallida administración corrupta y nepotista.
En su programa radiofónico del 9 de febrero que se trasmitió por Grupo Fórmula, Ruiz-Healy añadió: “A mí lo que más me sorprende es que Abelina López Rodríguez dice tener una maestría en derecho penal». Y esa extrañeza seguro la comparten también cientos o miles de acapulqueños asqueados de tanta corrupción, nepotismo, irresponsabilidad, falsa austeridad, arbitrariedades, falta de servicios vitales y, sobre todo, tanta holgazanería de quien al asumir la presidencia municipal juró que venía a trabajar y que no iba a ser igual que su antecesora, Adela Román Ocampo, a quien se comprometió demandar penalmente por obras fantasmas o adulteradas que ahora ella misma practica, por lo que surge otra pregunta obligada: «¿Con qué calidad moral habla de honestidad una alcaldesa que cuando fue diputada federal se jactó de ejercer con sobornos su profesión de abogada?»
¡Con justa razón quienes de verdad aman a Acapulco exhortan a sus conciudadanos a no confiar más en personas como Abelina López, que vino a servirse y no a servir a sus conciudadanos!
Con toda sinceridad, sin ‘acalorarse’, reflexione y respóndase a sí mismo el lector: «Con estas arbitrariedades e injusticas o acciones cobardes contra ocho empleados que nada tienen que ver con los reclamos públicos que le realiza Ramiro Solorio, ¿cree usted que Abelina López es la clase de mujer que merece dársele otra oportunidad para que siga gobernando Acapulco durante tres años más (2024-2027)?
P.D. Dicen quienes defienden la retención de salarios de los ocho empleados de apoyo de la regidora Brenda Hernández que no son trabajadores, sino «aviones». Si fuese ese el motivo de la represalia, ¿por qué no se ha depurado la nómina del Ayuntamiento infestada de aviadores y parientes de la misma alcaldesa, síndicos, regidores y directores o secretarios?
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